El vicepresidente del club Wilstermann, Gróver Vargas, manifestó ayer que “por temas de seguridad la Policía no dejó entrar más aficionados al estadio Félix Capriles”, refiriéndose a las denuncias de decenas de personas que se quedaron con el boleto en la mano y sin poder entrar a ver el clásico Wilstermann-Bolívar, el pasado domingo.
El dirigente aseguró que no cree que se haya clonado entradas, porque la empresa que las fabrica tiene sus sistemas de seguridad y está en La Paz.
“El tema pasa porque el público debe acudir más temprano al estadio, en aquellos partidos que son de mucho interés”, dijo Vargas.
Según el dirigente, las tribunas de general y parte de las curvas no estuvieron llenas. “Hasta el final del partido, no se llenó por completo el estadio”, dijo. Minutos antes de comenzar el partido, varios hinchas se quedaron fuera del escenario y algunos con entrada en la mano, lo cual derivó en las famosas avalanchas humanas.
El borderó del cotejo registró el ingreso de 21.375 espectadores que pagan su boleto y dejó una recaudación de 483.250 bolivianos.
En este detalle, no se considera el ingreso de los hinchas que tienen abonos o invitaciones, además, de algunos exjugadores, ancianos y niños.
No hay comentarios:
Publicar un comentario