No obstante, el dirigente explicó que este fin de semana, el plantel Aviador actuará ante Blooming, en el coloso de Cala Cala.
“Este fin de semana todavía jugamos en el Capriles y eso nos da más tiempo para colocar los otros escenarios en óptimas condiciones (Sacaba y Quillacollo)”, declaró Gróver Vargas, titular de Wilster.
Según el dirigente, las autoridades de ambos municipios “quieren ser los anfitriones” en los cotejos de Wilster ya que ambos están cerca de cumplir con las exigencias de seguridad, técnicas y comodidad que requiere la Liga.
Después del cotejo ante los celestes cruceños, los Rojos deberán recibir a The Strongest (15 de junio) y Oriente Petrolero (18). Cerrará el certamen frente a Petrolero (2 de julio).
“Enviaré una carta al gobernador Iván Canelas para ver la posibilidad de jugar el compromiso contra el Tigre en el Félix Capriles en coordinación con las empresas que realicen los trabajos de refacción. Caso contrario, lo haremos en Sacaba o Quillacollo”.
El dirigente adelantó que solicitará al Comité Técnico de la Liga que realice la inspección a ambos escenarios deportivos para lograr el aval y se puedan programar los encuentros del torneo Adecuación.
“A Sacaba le falta el enmallado del perímetro en el terreno de juego y los camarines. En Quillacollo se debe mejorar los vestuarios”.
La dirigencia espera que los hinchas que viven en los dos municipios tengan la posibilidad de apoyar a su equipo y, sobre todo, estar con los jugadores para sacarse una fotografía.
En la víspera, las autoridades municipales de Sacaba hicieron una inspección al estadio de dicha provincia para realizar los arreglos necesarios y conseguir el aval del Comité Técnico de la Liga.
Objetivo
Wilstermann quiere contar con escenarios alternos para los cotejos que dispute en la parte final del torneo boliviano.
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