Los entrenadores de Wilstermann y Boca Juniors, de manera respectiva, tendrán un compromiso aparte. Los dos estrategas llegan con realidades diferentes a este compromiso.
| REDACCIÓN DEPORTES Facebook: Opinion Bolivia | 04 mar 2019 | Ed. Imp.
No solo los jugadores están mentalizados en “entrar a matar” a la batalla que se librará mañana (20:30), sino también los dos entrenadores, quienes ya anunciaron que será “una batalla” la que se librará en el Félix Capriles de la Llajta.
Por un lado está el estratega del cuadro de Wilstermann, Miguel Ángel Portugal, quien llega a este compromiso con mucha presión en su espalda, esto por los malos resultados que viene cosechando en el fútbol local desde su llegada al Aviador, a inicios de año, tras la salida de Álvaro Peña.
Al mando del español, el elenco valluno solamente pudo sumar 14 puntos de 30 posibles (10 partidos disputados). Perdió tres cotejos de local y empató uno. Los números no acompañan al entrenador.
Esto ha generado que, ya hace un par de fechas, los hinchas del Imperio Escarlata pidan la salida del entrenador. En el ultimo cotejo, empate (3-3) ante Destroyers, en casa, los simpatizantes lanzaron botellas y corearon “fuera Portugal”.
Con ese antecedente cercano llegará el técnico ibérico al cotejo de mañana, y anunció que “pondrá toda la carne al asador” con la idea de revertir el momento negativo que atraviesa el club qhochala.
La dirigencia, sobre este momento futbolístico manifestó que “hay preocupación”, pero que se le da la confianza al entrenador, por lo menos hasta el cotejo de mañana ante el elenco argentino.
Una derrota de Wilster podría ser lapidaria para el estratega español, pues es un “secreto a voces” que podría terminar la vinculación con el club en caso de derrota. Uno de los temas que habría frenado aquello es la suma que tendría que pagarle la entidad al técnico.
Por el otro lado está Gustavo Alfaro, quien llegó a Boca Junior en enero tras la salida de Guillermo Barros Schelotto. Este último perdió la final de la Copa Libertadores de América 2018.
El inicio de Alfaro al mando del cuadro xeneize fue algo dudoso para los hinchas, pero luego, poco a poco, fue consiguiendo los resultados; sin embargo, el rendimiento sigue sin ser mejor, incluso, que el del año pasado.
El triunfo del sábado ante Unión, por la Superliga Argentina, permite a Alfaro “igualar” el inicio de Carlos Bianchi como entrenador, hace más de 10 años. El actual técnico logró 12 victorias cinco empates y cuatro derrotas en 21 partidos.
Con esa “motivación” llegará Gustavo al partido de mañana por la noche, en el Capriles. Incluso, un triunfo en el compromiso ante el Aviador le podría permitir consolidarse al frente del elenco argentino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario