En varias ocasiones los hinchas de Wilster gritaron desde las tribunas “fuera Portugal, fuera Portugal” y le arrojaron objetos. El domingo no fue la excepción, pese al triunfo sobre Royal Pari (2-1), en el estadio Félix Capriles.
“Yo voy por la calle y la gente esta entusiasmada conmigo, no noto ninguna presión y las personas me quieren. Ese supuesto rechazo es la manipulación de un pasado que no sé porqué,pero tampoco es toda la hinchada, hay gente que respeta y es afectuosa”, dijo el estratega en conferencia de prensa, luego de la sesión de entrenamiento en la víspera.
El adiestrador quedó molesto con los hinchas que lanzaron objetos y, el domingo, le mancharon la chaqueta con helado de canela y otras cosas que le llegaron a impactar.
Asimismo, adelantó que conversó con la dirigencia del club aviador para que asuma las medidas necesarias para identificar a los malos aficionados.
“Es inadmisible que te tiren cosas o agredir, eso es muy grave. Ya hablamos con los dirigentes para que se pueda tomar acciones. Me parece una actitud impresentable y luego de haber ganado a Royal Pari, aunque debía acabar con una diferencia de cinco goles a nuestro favor”.
Portugal recordó que al dirigirse al camarín aplaudió a los hinchas que le expresaron aprecio, pero no consideró como una forma de provocación.
El entrenador aseguró que llegó a Wilstermann con el propósito de llevar adelante un proyecto sin conocer lo que sucedió previamente y siente que “estoy pagando cosas del pasado”.
“Yo llevo en el club tres meses y estamos sosteniéndonos en la División Profesional y la Copa Libertadores de América”.
El español recordó que con el entrenador Peruano Roberto Mosquera Wilster llegó a los cuartos de final en la Libertadores, pero en el torneo local terminaron décimos.
Espera que la actitud de algunos aficionados mejores, sobre todo, en casa.
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