LIGA DANIEL CÓRDOBA TRABAJA CONTRA EL TIEMPO Y SE ALISTA PARA SU PRIMER EXAMEN COMO DT DE UNIVERSITARIO,

“Debemos transmitir a la gente de este club, que vamos a dejar hasta el último gramo de energía en la semana, hasta el último gramo de energía jugando”, aseguró el argentino Daniel Córdoba, que afronta su primera semana como director técnico de Universitario, en la que deberá visitar a Wilsterman, mañana, jueves (20:00), por la sexta fecha del Torneo Apertura.

En este corto tiempo, el entrenador, que arribó a Sucre el pasado lunes, buscará cambiar la actitud del plantel capitalino y salir del mal momento en el que atraviesa luego de cinco fechas, en las que sólo pudo sumar dos triunfos.

“Puedo asegurar el máximo esfuerzo, aunque sea para dar alegría a la gente, algo que no se puede conseguir en este mundo. Yo quiero que dejen todo, mueran en el intento por ganar”, comentó el estratega, que vuelve al fútbol boliviano luego de que en 2001 dirigiera The Strongest.

Por el escaso tiempo de trabajo antes de visitar a Wilstermann, Córdoba buscará mantener la base del equipo que dejó Javier Vega, cesado del cargo tras el partido ante Petrolero (3-1).

Además, manifestó su intención de conversar con el ex entrenador para conocer más a detalle la realidad del plantel.

Al margen del cambio de cuerpo técnico, Córdoba deberá lidiar con las bajas de Carlos Balcera, por lesión, y Ronald Puma, expulsado en el último partido. Por tanto, los puestos de laterales serían las únicas dudas en el onceno para jugar en el valle.

Sobre esta visita al cuadro aviador, el nuevo DT estudiantil aseguró que irán “con humildad pero con mentalidad ganadora, que no se negocia”. Tras este encuentro, Córdoba tendrá mayor tiempo para preparar su siguiente duelo, ante Real Potosí, el domingo 12 de marzo, en el estadio Patria.

Hoy será un día clave para resolver las dudas y conocer el onceno con el que la “U” afrontará el partido ante Wilstermann, toda vez que la jornada de ayer fue irregular ante la imposibilidad de utilizar el estadio Patria por la lluvia, que dejó anegado el campo de juego.