En medio de aplausos y gritos de apoyo de los hinchas, los jugadores de Wilstermann arribaron ayer a Cochabamba (18:45), con la clasificación a los octavos de final a la Copa Libertadores bajo el brazo.
Los Aviadores llegaron a la Llajta luego de la derrota ante el Peñarol uruguayo (2-0), el pasado miércoles en Montevideo. Sin embargo eso no evitó que los Rojos avancen en el campeonato y pisen el suelo de casa con una sonrisa implacable.
En el grupo 5 de la Copa terminó como líder Palmeiras de Brasil (13 puntos). Wilster sumó 9, Atlético Tucumán de Argentina, 7, y los Carboneros acumularon 6.
Con la felicidad por el objetivo conseguido y el cansancio notable en el rostro, luego de varias horas en los aeropuertos, los jugadores expresaron que esperan “avanzar lo más lejos posible” en el certamen continental.
“Estoy orgulloso de un plantel que ha logrado algo importante para la institución. No es fácil enfrentar a rivales que tienen una historia diferente a la nuestra”, declaró Roberto Mosquera, técnico de Wilster.
Además, considera que el apoyo que recibió de la hinchada en este certamen fue importante. También cree que la dirigencia está convencida del sistema de trabajo que realiza.
El entrenador aseguró que desde hoy el plantel de jugadores retornará a los entrenamientos de cara al compromiso que debe disputar este domingo frente a Universitario de Sucre, en el estadio Patria.
El propósito del conjunto Rojo es abandonar el décimo puesto de la tabla del torneo liguero.
TRES LESIONADOS Los jugadores Fernando Saucedo, Edward Zenteno y Juan Pablo Aponte terminaron lesionados el miércoles, tras el cotejo ante los uruguayos.
“Saucedo tiene una fuerte contusión en la canilla derecha y no jugará ante la U”. Zenteno y Aponte acusan molestias en sus tobillos del lado derecho y serán evaluados hoy para definir el tiempo de recuperación.
Objetivo
“Vamos a seguir soñando y prepararnos de la mejor manera para jugar los octavos”.
Roberto Mosquera
director tÉcnico de Wilster
No hay comentarios:
Publicar un comentario