El 2017 fue uno de los mejores años para Wilstermann en la Copa Libertadores. Y es que muchos hinchas y fieles seguidores consideran que la campaña realizada aquel año se constituye como un nuevo Ciclo de Oro, pues “mataron a gigantes” del continente en los partidos disputados en el estadio Félix Capriles, llegando hasta los cuartos de final del torneo.
Antes de recibir en la Llajta a los grandes River Plate, Peñarol, Atlético Tucumán, Palmeiras y Atlético Mineiro, muchos de los hinchas (más los que no lo eran) daban “por hecho” que el Rojo iba a tener una “mala experiencia” ante dichos rivales.
Sin embargo, cuando disputaron aquellos cotejos en el Capriles se ganaron el apodo de “mata gigantes”, pues lograron vencer al Peñarol uruguayo (6-2), al Tucumán (2-1) y al Palmeiras (3-2), por la fase de grupos. En la ronda final, Wilster siguió fuerte y pasó a los cuartos de final luego de ganar en casa al Atlético Mineiro (1-0) y empatar 0-0 de visita.
Luego vino el cotejo “más complicado” para el elenco valluno. Recibió, en septiembre, a River Plate. Fue sorpresa, más allá de cómo jugaba en ese entonces, pues venció con una goleada al Millonario (3-0).
Ese marcador hacía soñar a los hinchas con un pase a las semifinales, pues tenía que ir a “cuidar” el resultado de la ida. Sin embargo pasó lo que ningún hincha quería ver. El cuadro valluno recibió ocho goles en el Monumental y tuvo una amarga despedida de la Copa Libertadores.
En 2018, y conservando la base de jugadores que logró la hazaña un año antes, el Aviador también abrochó su participación en la competencia más añeja del continente, pero con el detalle de que sus cotejos los jugó en el estadio Patria de Sucre, ante la refacción del estadio Félix Capriles, que se preparaba para los Juegos Suramericanos del pasado año.
Su primera llave fue ante Oriente Petrolero (fase 2). En la ida ganó como visitante (2-1), mientras que en la vuelta empató en Sucre (2-2). Con esos resultados pasó a la fase 3 en la que se enfrentó a Vasco da Gama.
En la ida fue goleado en Brasil (4-0) y muchos ya daban por muerto al Rojo; sin embargo, Wilster se reivindicó en Sucre tras ganar por el mismo resultado. Todo se definió en los penales, tanda en la que fue eliminado por el representante brasileño (3-2).
Con esos antecedentes llega Wilstermann al compromiso de mañana. La consigna es seguir ampliando esa racha que le permitió hacerse con el apodo de “mata gigantes”.
El partido tendrá máxima seguridad para evitar contratiempos.
De menos a más
El Rojo consiguió aquellas históricas victorias a estadios llenos, en especial en el cotejo ante River Plate.
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