Raúl Olivares esperó su turno y brilló en el Tahuichi

El arquero de Wilstermann Raúl Olivares fue el mejor hombre que tuvo el equipo aviador en el terreno de juego frente a Blooming (1-3). El chileno esperó con paciencia su oportunidad para resguardar los tres palos y respondió a las expectativas que tuvo el entrenador Julio Zamora sobre su profesionalismo. Los errores que en algunos momentos tuvo la defensa aviadora fueron minimizados por el golero.

“Me estuve preparando para cuando llegue el momento”, manifestó Olivares tras la victoria de su equipo en el Tahuichi. El golero tuvo que esperar su turno, ya que delante de él tenía al seleccionado nacional Gustavo Salvatierra. Olivares ahora jugó de entrada, situación que no desaprovechó jugando a gran nivel.

Olivares tuvo claves intervenciones desde el primer tiempo. En el minuto 32, detuvo un potente remate del brasileño Leandro Ferreira. Minutos más tarde le dijo no a una pelota que llegó de los pies de Hugo Bargas. Así como estas intervenciones, Olivares le negó en varias oportunidades al franco-argentino, que buscó por todos lados pero siempre perdió en el mano a mano con el buen portero aviador.