Los ocho hinchas detenidos que fueron llevados a dos audiencias cautelares distintas y que al final fueron liberados con medidas sustitutivas, todos son hinchas de Wilstermann, no hubo ninguno de la barrabrava de Oriente.
En la mañana de ayer, se llevó una primera audiencia de dos jóvenes, Alexander Silvestre Huanca y Josué Puma Gerónimo, hinchas del cuadro aviador, quienes obtuvieron medidas sustitutivas a la detención provisional; arraigo, presentación a firmar un libro en la Fiscalía cada fin de mes y la presentación de dos garantes personales, ya sean de la ciudad de Cochabamba o Santa Cruz, pero con domicilio fijo conocido, indicó la fiscal Nancy Carrasco.
Carrasco sostuvo que los dos jóvenes fueron imputados por allanamiento de domicilio, en los hechos sucedidos en el barrio Petrolero Sur, donde ingresaron a la vivienda de la exdirigente vecinal y exconcejala, Alina Ayala de Hoyos, cuando huían de la turba dispuestos a masacrarlos.
La fiscal señaló que las investigaciones continuarán hasta dar con los autores de los daños materiales y robo de la vivienda de Hoyos y de otras dos casas más, donde los hinchas de Wilstermann se refugiaron para huir de sus perseguidores.
Posteriormente, también en la mañana, se llevó otra audiencia cautelar con los otros seis hinchas del equipo cochabambino, entre ellos una mujer, en la que la autoridad judicial también les otorgó medidas sustitutivas, arraigo, presentación al Ministerio Público cada 15 días y la presentación de dos garantes personales a cada uno de los imputados por allanamiento de domicilio.
A estas medidas se les añadió la prohibición de asistir a partidos de la Liga.
El fiscal José Parra señaló que estos seis coprocesados, por el delito de allanamiento, es por el caso del centro médico Prosalud Dr. Ismael Suárez, donde los hinchas se refugiaron, pero que igual la turba ingresó, los golpeó y destruyó puertas y ventanas de ese inmueble.
Parra dijo que una vez se conozca la evaluación de los daños a este centro de salud se verá si corresponde considerar estos delitos como daño simple o daño calificado, lo que determinará el tipo de las investigaciones a seguir.
PIDEN INFORME A LA POLICÍA
Los diputados Demócratas, Luis Alberto Vaca y Víctor Hugo Pérez, han solicitado un informe escrito al comandante de la Policía de Santa Cruz, Sabino Guzmán, para que explique por qué el grado de violencia que se vio el domingo en el partido entre Oriente y Wilstermann.
De manera concreta, los parlamentarios quieren saber por qué los policías desplegados en el estadio Tahuichi Aguilera lanzaron gases lacrimógenos a los hinchas durante el desarrollo del partido y, luego, no pudieron evitar el desenlace violento entre las barrabravas de los equipos que fueron protagonistas de ese encuentro.
Piden al comandante Guzmán les haga conocer la responsabilidad de la Policía en el resguardo de la seguridad de los ciudadanos en el estadio, así como la coordinación que tiene esa entidad armada con los equipos de fútbol para el desarrollo de este tipo de espectáculos, como también, el plan de contingencia para resguardar la seguridad antes del partido, durante el cotejo y después de finalizado el encuentro deportivo.
HOYOS AMENAZA CON HUELGA DE HAMBRE
Alina Ayala de Hoyos, exconcejala y exdirigente vecinal de Santa Cruz, acusó y denunció ante la justicia a los dirigentes de la Liga, a los clubes Oriente Petrolero y Wilstermann, de ser los culpables de la violencia y destrozos causados en su vivienda.
Alina Ayala tiene ya 80 años y en su casa le destruyeron dos hornos, le robaron joyas y Bs 3.000, aparte de la destrucción del portón de su casa, entre otros daños menores.
Ella es madre del exarquero de Oriente y de la selección boliviana, Heber Hoyos. Mencionó que si los dirigentes de estas entidades deportivas no quieren hacerse cargo de los daños y reponen sus pérdidas materiales y económicas, se va a declarar en huelga de hambre.
“Voy a asumir una huelga de hambre, yo sé que este pueblo me va a apoyar, las juntas vecinales y toda mi familia estará conmigo”, afirmó.
La exdirigente lamentó el silencio de la Liga y de los clubes, que han preferido no dar la cara hasta que las aguas se calmen.
Ayer debió llevarse a cabo una rueda de prensa de la Liga para hablar sobre el tema; sin embargo, la postergaron para hoy.
3 PROFESIONALES Y 3 ESTUDIANTES, HINCHAS DEL ROJO
Santa Cruz | Los tiempos
Los seis hinchas de Wilstermann que fueron detenidos y liberados por el caso de allanamiento al centro Prosalud, tres son jóvenes profesionales, uno es ingeniero civil y otros dos son licenciados en fisioterapia y kinesiología, mientras que los dos varones y la mujer son estudiantes universitarios, según indicó la abogada que los defendió Yulemy Ángulo.
Esta versión fue corroborada por David Rojas, padre del ingeniero Armando Rojas, uno de los afectados en los incidentes que se originaron el domingo pasado.
Según el progenitor de este hincha, todos ellos no pertenecen a los Gurkas, la barrabrava del club Wilstermann, sino que se subieron al bus de la delegación que vino de Cochabamba a Santa Cruz a observar el partido entre los dos clubes de la Liga de Fútbol Profesional Boliviano (LFPB).
De la misma manera el padre de familia, Carlos Osinaga, señaló que su hijo es fisioterapeuta y kinesiólogo. Osinaga cuestionó duramente a los dirigentes de la Liga y a los clubes que lo componen, porque no ponen un alto a la creciente violencia que se produce después de los partidos.
“Lastimosamente esto ya no es deporte, parece un circo romano, creo que a los que manejan la institución del fútbol y los clubes les gusta que haya sangre para que más gente vaya a los espectáculos, y la prensa televisiva también no hace nada, es permisiva, porque ya tienen paquetes vendidos de publicidad”, cuestionó Osinaga.
También los padres de familia de los hinchas acusados y detenidos por la Policía, cuestionaron el papel de la institución del orden, puesto que a los adherentes de Wilstermann los sacaron minutos antes de que finalice el partido y los condujeron solamente a cuatro cuadras del estadio Ramón Aguilera Costas, y luego los abandonaron a su suerte.
Tanto Osinaga como Rojas lamentaron la desidia de la Policía que no protegió a los hinchas del plantel valluno hasta el Parque Urbano donde estaban los buses para salir a la ciudad de Cochabamba.
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