Wilstermann paga 3.400 dólares por las tarjetas amarillas y rojas que sus jugadores vieron en los cuatro partidos de la Copa Libertadores.
El Reglamento de Competición del certamen indica: “Las amonestaciones tendrán una sanción pecuniaria de 200 dólares, por cada una de ellas. El importe de la multa será debitado automáticamente del monto a recibir por los clubes de parte de la Conmebol”.
La misma normativa explica que los jugadores que acumulen tres acrílicos quedarán suspendidos por un partido, de forma automática.
De momento, en Wilstermann fueron castigados ocho jugadores con tarjetas amarillas y tres de ellos ya vieron en dos oportunidades esa cartulina.
Los futbolistas que están en capilla en el cuadro Rojo son: el cochabambino Edward Zenteno, el brasileño Álex Da Silva y el argentino Cristian Chávez. Fueron amonestados una sola vez Raúl Olivares, Marcelo Bergese, Luis Carlos Cabezas, Juan Pablo Aponte y Thomaz Santos. Este último milita en el Sao Paulo brasileño.
Los jugadores que fueron castigados con una tarjeta roja cuentan con una multa pecuniaria dispuesta por el Reglamento.
“Las expulsiones por tarjeta roja directa se encontrarán sujetas a la imposición de las multas económicas que determinen, en su caso, los órganos disciplinarios de la Conmebol”.
La normativa también considera que un jugador expulsado “por roja directa por evitar una ocasión manifiesta de gol (...) tendrá una sanción económica de 600 dólares”.
El Reglamento de la Copa Libertadores prohíbe que los futbolistas ingresen al terreno de juego acompañados por niños o bebés. Los clubes infractores serán pasibles a sanciones de 10 mil dólares y disputar el próximo encuentro internacional a puertas cerradas.
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