El jugador brasileño de Wilstermann, Lucas Gaúcho, cuestionó hoy que los casos de racismo que suceden en cancha queden impunes cuando el país tiene la intención de ser subsede del Mundial 2030.
"Es una vergüenza que eso pase a un país que quiere ser (sub)sede de una Copa del Mundo", señaló al referirse a lo ocurrido con su compañero Serginho durante el partido ante Blooming en Santa Cruz.
"No puede estar pasando esa clase de cosas ¿Cómo se va a elegir (a Bolivia) si ese tipo de cosas suceden en este país?", manifestó.
Hace unos días, el presidente Evo Morales lanzó ayer un video para promocionar la candidatura de Bolivia como subsede del Mundial de la FIFA en 2030. En el mismo se ofrece construir un estadio con capacidad de 70 mil personas para albergar el evento internacional.
Gaúcho también apuntó que en Brasil también existe racismo, pero que las sanciones son severas.
"Nosotros somos muy bien acogidos acá, pero cuando suceden estas cosas nos ponemos muy tristes y repensamos mil veces qué estamos haciendo", agregó.
El domingo pasado durante el encuentro por fecha 13 del torneo Apertura, Serginho abandonó el campo de juego, a minutos del final, tras recibir gritos racistas por parte de la hinchada del club cruceño.
El lunes, la dirigencia de Wilsterman manifestó su repudió y anunció tomar medidas legales contra Blooming y tienen la intención "sentar precedente" en cuanto a sanciones.
Ayer, el presidente de la institución de Santa Cruz, Juan Jordán, hizo su descargo y apuntó a Serginho como provocador, alegando que mostró el dedo del medio a la tribuna, y aseveró que se inició una demanda por "ofensa al público".
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