El entrenador de Wilstermann, Julio Zamora, indicó que continuará trabajando con el equipo hasta que le paguen lo que le deben y formalicen la rescisión de su contrato, tras conocerse ayer su posible alejamiento por decisión de esta institución.
"Esto es (con) papeles sobre la mesa. Hay un contrato por dos años, pero yo no quiero cobrarlo. Solo (quiero) cobrar la rescisión de contrato, los dos sueldos que me deben, el premio de la Libertadores, los quince días de junio que hemos trabajado y nada más (...). Hasta que no se cumpla lo que me deben, yo no puedo dejar de trabajar", manifestó Zamora ante los medios luego de la práctica de los aviadores en su complejo esta mañana.
Desde ayer circula la noticia de que la dirigencia del Rojo decidió rescindir el contrato del DT luego del bajón que atraviesa el equipo en el Torneo Apertura de la Liga de Fútbol Profesional Boliviano. En el último cotejo, Wilstermann sufrió una goleada (5-0) contra Petrolero.
Hasta el momento, dirigentes no hicieron oficial la salida de Zamora del club aviador.
"Poner las cosas en claro, yo no puedo como persona ni como profesional aceptar algunas cosas. Me están pidiendo cosas que no van con mi persona. Por ejemplo, que yo los ayude a sacar jugadores. Imposible. Si los traje o no es un tema aparte, pero yo no me voy a prestar para esa situación", explicó el entrenador.
Zamora reconoció que el plantel es un grupo "fenomenal" que está atravesando un momento difícil, pero que "no se merece" esta situación.
"(Los dirigentes) ya habían tomado la decisión, les dije que junten la plata y voy y firmamos la rescisión de contrato. El fútbol es así, uno se va y uno tiene que ver. No me molesta eso, lo que molesta es que digan que al plantel no se les debe nada, que está todo bien. No está todo bien", indicó Zamora.
El entrenador indicó que todavía se les debe sueldos de dos meses a los jugadores, y que además los dirigente les niegan ciertas necesidades que pidió anteriormente, desde elementos como comida y refrescos hasta pretemporadas o concentraciones.
"Yo puse la rescisión (en el contrato) porque sabía que en algún momento iba a pasar esto. Al ver que no me dejaban tomar decisión, al momento en que el equipo tuviera problemas sabía que el culpable iba a ser yo", concluyó Zamora.
Esta mañana el plantel entrenó con normalidad con miras al partido con Sport Boys este sábado a las 15:00.
Ocho meses en Wilster
El DT aseguró sentirse "incómodo" y "triste" ante la situación que vive el club cochabambino. Ayer habló con el presidente, Gróver Vargas: "Él me dijo que era ilógico que yo me vaya".
"Si me tengo que ir, que creo que sí, me voy feliz, porque nadie me puede decir nada. Trabajé, hice lo que tenía que hacer, fui leal a un montón de cosas, siempre me callé la boca aún en los problemas, pero hay situaciones que no las puedo manejar", expresó Zamora.
Este hecho se dio por la incomodidad de algunos dirigentes "que ni siquiera vienen a los entrenamientos", manifestó.
"En estos ocho meses creo que fueron más alegrías que tristezas. El fútbol tiene estas cosas, suele pasar", agregó Zamora.
Wilstermann ganó el Torneo Clausura a mediados de este año, así como el campeonato de la Copa Cine Center.
"La realidad marca que le dimos cosas muy importantes al club y en la primera que cambió te pagan de esta manera (...). A mí no me molesta la salida, lo que me molesta son los comentarios. Les están mintiendo", expresó el entrenador.
Ante la posibilidad de que continuara al mando del Rojo, Zamora admitió: "Si hay que continuar, hay que no continuar, pero no voy a continuar de la misma manera".
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